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Ceremonia de Firma del Acuerdo de París

Intervención de la Canciller Susana Malcorra

22 de abril de 2016

 

Madame Chair; Jefes y Jefas de delegaciones; colegas y amigos,

El Sr Secretario General nos ha invitado y tenemos que agradecerle especialmente que nos haya convocado en este día marcando un hito histórico.
El último informe del Panel Intergubernamental en Cambio Climático es inequívoco e informa claramente respecto de las consecuencias de nuestra inacción y de la atribución del calentamiento global a la actividad humana. El cambio climático es un hecho y sus efectos son palpables y no conocen fronteras.
Ha llegado el momento de actuar dejando de lado especulaciones e incorporando los intereses de todos y cada uno de los actores para el desarrollo sustentable de los países.

Así como en la Argentina se ha iniciado un nuevo camino de apertura global, queremos profundizar la cooperación internacional para mejorar la capacidad de los países para adaptarse a los efectos del cambio climático y reducir sus emisiones.

Conscientes de la importancia y de la necesidad de que no se demore la entrada en vigor del Acuerdo de París, la Argentina se compromete a hacer los mayores esfuerzos para su pronta ratificación en los próximos meses.

Sin duda el 2015 ha sido signado en la historia como un hito en decisiones globales de alta importancia:
• Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) fueron aprobados por la Asamblea General de las Naciones Unidas y
• el Acuerdo de París de Cambio Climático fue alcanzado al finalizar el año.
Estos dos hitos son absolutamente claves para el futuro del mundo.

En lo que respecta al cambio climático sin duda hubo un aporte adicional que fue la Encíclica “Laudato Sí” del Papa Francisco del año 2015 también. Esta ha sido una bisagra en el marco del debate social, económico y político que se gesta en torno de la crisis ambiental y los objetivos del desarrollo. Abre un período de profundo revisionismo ecuménico a nivel individual y colectivo exhortando a un cambio inmediato que no admite retrasos y clama por unidad en la formulación de grandes consensos. La noción de unidad es clave para determinar las líneas de acciones comunes.

Por ello, la República Argentina se encuentra plenamente comprometida con el abordaje de este desafío y se ha abocado al cuidado de nuestra casa común, por un lado, gestionando el riesgo del cambio climático y por el otro, tratando de promover políticas nacionales para la reducción sostenida de sus emisiones.

En este sentido, quisiera aprovechar la oportunidad para informar que la Argentina se ha propuesto revisar sus contribuciones (Contribuciones No Determinadas –NDCs-) que actualmente prevén una reducción del 15% de sus emisiones de manera incondicional y 30% de manera condicional al año 2030 y nuestro compromiso estará enfocado en la transformación de esta propuesta en una más ambiciosa.

Hay mucho por decir, hay mucho por hacer y hay poco tiempo para hacerlo. Me parece que es el momento en el cual nos convenzamos que la firma de este Acuerdo es el primer paso de una larga secuencia de hitos que permitirán abordar la temática de manera integral y sostenida.

Quisiera instar a todos los presentes a comprometernos con las generaciones futuras y realizar los mayores esfuerzos para solucionar este problema global demostrando que juntos sí podemos. Porque necesitamos creer para poder cuidar. Cuidar para poder avanzar. Y avanzamos poniéndonos de acuerdo en el diálogo con las generaciones presentes para construir los cimientos de las generaciones futuras.

Muchas gracias