Intervención de la Representante Permanente de la República Argentina, Embajadora María del Carmen Squeff

14 de octubre

 

Sra.  Presidenta,

Agradezco especialmente la presencia de la Alta Comisionada y reitero el compromiso de la Argentina para colaborar de forma permanente con la labor de la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos

Quiero reiterarle, tal como mi país lo hizo en el Consejo de Derechos Humanos, el firme apoyo de la República Argentina para el valioso trabajo de cooperación y apoyo técnico  que su Oficina realiza en el terreno y cotidianamente en todo el mundo.

Creemos firmemente en la necesidad de continuar fortaleciendo el sistema universal de promoción y protección de los derechos humanos y trabajar en forma conjunta con la Oficina del Alto Comisionado para lograr dicho objetivo. 

Agradecemos por todos sus esfuerzos y llamados a implementar respuestas al COVID-19 que tengan en cuenta las necesidades de los grupos vulnerables con un enfoque integral e interseccional. Cuenta con el apoyo de la Argentina para “reconstruir mejor”, abordando los desafíos de los grupos en situación de vulnerabilidad y/o históricamente discriminados, con respuestas que adopten un enfoque basado en los derechos humanos, a fin de lograr sociedades más justas, inclusivas, igualitarias, y diversas.

En ese sentido, quisiéramos destacar su continuo apoyo al Grupo LGBTI que la Argentina co-preside junto con Países Bajos en el ámbito de las Naciones Unidas y agradecemos su importante presencia en el evento que organizamos en la semana de alto nivel.

En el contexto de COVID-19 la Argentina implementa medidas específicas entendiendo que la emergencia sanitaria pone de manifiesto la situación de vulnerabilidad de la población travesti/trans, que atraviesan históricamente una situación de exclusión estructural donde a la marginalidad habitual se suma la imposibilidad de garantizar los medios de subsistencia. En ese respecto, se reforzó la asistencia alimentaria para personas travestis y trans, articulando con centros comunitarios, comedores y organizaciones de la sociedad civil la entrega de alimentos necesarios para el período de aislamiento. También se gestionó la incorporación de personas travesti y trans a los programas sociales del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación, a fin de garantizar un ingreso económico mensual.

Por otra parte, quisiéramos agradecer a su Oficina por su trabajo en la promoción y protección de los derechos humanos de las personas mayores. La pandemia pone de manifiesto la necesidad de contar con políticas públicas integrales destinadas a este colectivo.

A efectos de que las personas mayores puedan acceder de manera segura, diferenciada y preferencial a servicios públicos y bienes esenciales en el contexto de la pandemia, en línea con las recomendaciones internacionales, la Argentina implementa una serie de medidas: -Sólo voy a mencionar algunas acciones concretas por la falta de tiempo- el Gobierno Argentino otorga subsidios extraordinarios por emergencia para los adultos mayores, como también el Programa de Atención Médica Integral (PAMI) dispuso una nueva modalidad de receta médica electrónica, con el objetivo de evitar la concurrencia a consultorios médicos y centros de salud, garantizando el acceso a los medicamentos de forma simple y rápida durante la pandemia.

Sra. Presidenta

Para finalizar, considerando que en el día Internacional de las personas mayores, el pasado 1 de octubre, usted destacó “que la falta de un régimen de protección internacional específico de los derechos de las personas mayores es quizás la brecha normativa más obvia y urgente”, subrayando la necesidad de acelerar los esfuerzos actuales para desarrollar una nueva convención internacional de derechos humanos sobre los derechos de las personas mayores, desearíamos consultarle respecto a eventuales aportes que podría realizar la Oficina del Alto Comisionado para el intercambio de experiencias y el desarrollo de estándares internacionales en la materia.

 

Muchas gracias.