Consejo de Seguridad
Debate abierto sobre
“SEGURIDAD FRONTERIZA CONTRA TRÁFICOS ILÍCITOS”
Señora Presidente,
Mi Delegación agradece la posibilidad de dirigirse al Consejo de Seguridad. También desea agradecer la convocatoria a este debate tan oportuno e importante sobre la amenaza que se deriva para la paz y la seguridad internacionales de los tráficos ilícitos a través de fronteras poco seguras.
En varios pronunciamientos, este Consejo ha exhortado a los Estados a tomar medidas y a cooperar en la defensa de sus fronteras contra el tráfico ilícito de drogas, armas, personas, el desplazamiento de terroristas y circulación de sus activos y otras amenazas a la soberanía estatal. Siendo que esas amenazas están a menudo interrelacionadas, un enfoque holístico parece ser el más adecuado para desarrollar respuestas adecuadas en los planos nacionales, así como regionales e internacional. Tal enfoque holístico no debería ni podría hacer caso omiso de las particularidades únicas que caracterizan determinadas amenazas. Tampoco esas amenazas van siempre de la mano. Por ejemplo, mientras que el terrorismo a menudo se financia con otras actividades delictivas; en los otros delitos el terrorismo no es necesariamente parte de la ecuación.
Señora Presidente,
Es preciso reconocer que el control de las fronteras es responsabilidad primaria de cada Estado, a través de la acción coordinada de diferentes organismos con competencia en la materia. No obstante, la Argentina considera que es fundamental avanzar en el fortalecimiento de los mecanismos de cooperación entre países fronterizos, de modo de garantizar el control a través de la adopción de legislación y de la construcción de capacidades nacionales para identificar posibles soluciones a los desafíos en materia de fronteras.
A nivel nacional, a fines de 2010 se creó el Ministerio de Seguridad, con el objeto de fortalecer los mecanismos de seguridad y prevención, con competencia específica y exclusiva en la prevención y lucha contra el terrorismo, así como también de la delincuencia organizada transnacional; unificándose bajo su comando la Prefectura Naval, la Gendarmería Nacional, la Policía de Seguridad Aeroportuaria y la Policía Federal.
A nivel regional, la Argentina coopera estrechamente con los países miembros del MERCOSUR y sus Estados Asociados, a través de la armonización de legislaciones nacionales sobre el control de las armas de fuego, municiones y explosivos y la coordinación de políticas en la materia. También coopera con otros países de la región para fortalecer sus capacidades nacionales con vistas a la plena implementación de la resolución 1540 (2004). La cooperación se lleva a cabo asimismo con las fuerzas de seguridad de países limítrofes; instrumentalizada a través de acuerdos bilaterales de cooperación entre las gendarmerías y las prefecturas, y el desarrollo de sistemas integrados de información como el que se está desarrollando con Brasil (con el apoyo económico de la Unión Europea) sobre trata de personas, a ser implementado durante 2012. En la Triple Frontera actúa desde 1996 un Comando Tripartito -integrado por las fuerzas policiales y de seguridad de Argentina, Brasil y Paraguay destacadas en dicha zona- que juega un rol importante en lo concerniente a las acciones desarrolladas en la lucha contra el tráfico de armas y municiones, contrabando -en todas sus expresiones -, tráfico de drogas, secuestro de personas, lavado de dinero, tráfico ilegal y trata de personas, como así también el permanente monitoreo de datos sobre las actividades del terrorismo internacional y delitos conexos.
A instancias de nuestro país, en el ámbito de la Reunión de Ministros del Interior del MERCOSUR se está analizando un Proyecto de "Guía de Actuación Regional para la detección temprana de situaciones de trata de personas en pasos fronterizos del MERCOSUR y Estados Asociados" que brindará pautas para potenciar las tareas de prevención y las posibilidades de las autoridades de control migratorio de los países de la región a fin de detectar, en forma temprana, casos de trata de personas.
Estas iniciativas demuestran la toma de conciencia temprana por parte de la Argentina y de sus socios del Cono Sur acerca de la necesidad de mayor cooperación y coordinación para asegurar sus fronteras y defenderse contra los tráficos ilícitos.
Señora Presidente,
Aunque el fortalecimiento de la seguridad fronteriza es indispensable para luchar efectivamente contra los tráficos ilícitos; entendemos que en determinadas condiciones el escaso nivel de desarrollo relativo de uno o más países puede conceder un marco propicio a las amenazas no tradicionales a la paz y la seguridad como el terrorismo, el tráfico ilícito de armas, el tráfico de drogas y la delincuencia organizada trasnacional, entre otros, como ha quedado en evidencia en el caso del Sahel. Resulta claro para todos que no es tarea del Consejo asumir responsabilidades de otras estructuras del sistema tales como la Asamblea General, el ECOSOC o la ONUDD. El eje de la cuestión radica más bien en reflexionar acerca de la manera en que el Consejo debe tener en cuenta las cuestiones de desarrollo en sus decisiones relativas a la paz y la seguridad.
Tampoco la seguridad de las fronteras debe ser a costa de -ni usarse de excusa para- impedir u obstaculizar el ejercicio de garantías humanas fundamentales como es el derecho de los migrantes. No creemos que la seguridad deba lograrse a expensas del estado de derecho, ni aceptamos la idea de que las violaciones de los derechos humanos son admisibles en determinadas circunstancias.
Señora Presidenta,
La Argentina espera la evaluación del Secretario General sobre el trabajo de las Naciones Unidas en materia de asistencia a los Estados para asegurar sus fronteras contra los tráficos ilícitos, así como que se convoque a un diálogo amplio y transparente con toda la membresía para discutir sus conclusiones y seguir analizando el tema.
Muchas gracias
Misión Permanente Argentina ante las Naciones Unidas