La Asamblea General de las Naciones Unidas adoptó el Tratado sobre el Comercio de Armas, el primer instrumento jurídicamente vinculante que establece normas comunes para regular el comercio internacional de armas convencionales.
La Argentina junto a Australia, Costa Rica, Finlandia, Kenia, Japón y el Reino Unido habían iniciado y liderado hace siete años el proceso que culminó con la adopción del Tratado el pasado 2 de abril.
El objetivo del Tratado es el de evitar que las armas sean utilizadas para cometer violaciones graves del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos, o sean desviadas hacia terroristas o grupos criminales. En ese sentido, el Tratado establece criterios comunes para la evaluación de las autorizaciones de exportación que permitirán dar previsibilidad a las transferencias de armas convencionales y garantizar que sean realizadas conforme los principios del derecho internacional vigente.
Al mismo tiempo, el acuerdo respeta y reconoce el derecho soberano de cada Estado de desarrollar o adquirir las herramientas necesarias para su defensa y será abierto a la firma del Secretario General el 3 de junio próximo.