Intervención de la Encargada de Negocios a.i., Representante Permanente Alterna de la Argentina ante las Naciones Unidas, Ministro Plenipotenciario Gabriela Martinic
3 de octubre
Señora Presidente,
Permítame en primer lugar felicitarla a usted y demás integrantes de la Mesa y asegurar la plena cooperación de mi Delegación.
Quisiera también agradecer la presencia e intervenciones en el día de ayer del Presidente de la Asamblea General y de la Secretaria General Adjunta y Alta Representante para Asuntos de Desarme.
Señora Presidente,
Frente a un contexto internacional que puede volcarnos hacia el pesimismo, principalmente debido a los ensayos nucleares realizados por la República Popular Democrática de Corea, los cuales han sido condenados en los términos más firmes por mi país, pero también por la constatación de la utilización de armas químicas en el conflicto sirio, entendemos que es nuestro deber rescatar aquellas decisiones que la comunidad internacional ha sabido tomar en conjunto, y que han dado sobradas pruebas de una determinación en avanzar hacia un mundo libre de armas de destrucción en masa.
Valga como ejemplo la conmemoración en abril de este año de los veinte años de vigencia de la Convención sobre la Prohibición de las Armas Químicas que se ha convertido en uno de los instrumentos de desarme universal más exitosos de todos los tiempos. En tal sentido, saludamos el anuncio realizado por la Federación de Rusia el 27 de septiembre pasado sobre la destrucción total de su arsenal químico.
Este año la Argentina celebra junto a los otros 137 Estados que han suscripto el Código de Conducta de La Haya (HCOC) los 15 años desde su elaboración y reafirma la importancia del HCOC como un instrumento multilateral de transparencia y construcción de confianza.
La Argentina destaca, asimismo, dos acontecimientos de especial significancia para la maquinaria de desarme que tuvieron lugar en el primer semestre de este año y que demuestran que el diálogo es posible y que hoy más que nunca el consenso debe ser la regla que nos lleve a acuerdos de alcance universal. Primero, las recomendaciones adoptadas por la Comisión de Desarme sobre medidas de fomento de la confianza en el campo de las armas convencionales y segundo las recomendaciones sobre objetivos y agenda para una Sesión Especial de la Asamblea General Dedicada al Desarme. Estos logros renuevan nuestras esperanzas en destrabar la parálisis en materia de desarme.
A nivel regional, los países de América Latina y el Caribe hemos celebrado la adopción de la Declaración de los Estados Miembros del OPANAL en el Quincuagésimo Aniversario de la conclusión del Tratado para la Proscripción de las Armas Nucleares en la América Latina y el Caribe.
Señora Presidente,
La cuestión del desarme nuclear ha sido siempre de carácter prioritario para la Argentina, y por ello ha participado de toda discusión, foro o negociación donde se tratara, con la convicción de que el TNP constituye la piedra angular del régimen jurídico internacional de no proliferación y de desarme nuclear.
La próxima Conferencia de Revisión del TNP es particularmente significativa ya que marcará el 25º aniversario desde la Conferencia de Revisión y Extensión de 1995. Como es de conocimiento, la Argentina presentó con el endoso del GRULAC, la candidatura del Embajador Rafael Grossi para presidir dicha Reunión.
En materia de desarme nuclear, la Argentina comparte aquellos llamados a nivel internacional que exigen una reafirmación del compromiso político y de la adopción de medidas concretas por parte de los países poseedores tendientes a alcanzar un mundo libre de armas nucleares.
El desarme general y completo, verificable internacionalmente y que garantice su irreversibilidad es un desafío que, a fin de ser efectivo, la comunidad internacional debe abordar de forma constructiva y sobre la base de amplios consensos.
El compromiso argentino con la necesidad de continuar trabajando hacia la consecución de un mundo libre de armas nucleares hizo que mi país participara del proceso negociador del Tratado para prohibir las Armas Nucleares. El espíritu que sustenta dicho Tratado es compartido por la Argentina, razón por la cual votó a favor de su adopción el día 7 de julio pasado.
No obstante ello, la Argentina se encuentra analizando el impacto que este Tratado podría provocar en otros ámbitos relevantes del régimen vigente en materia de no proliferación y los usos pacíficos de la energía nuclear, cuya piedra angular es el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares.
Por otra parte, en noviembre próximo, mi país será sede del quinto Plenario del Partenariado Internacional para la Verificación del Desarme Nuclear (IPNDV). Participamos de esta iniciativa convencidos de que para avanzar hacia un mundo libre de armas nucleares resulta fundamental mantener un diálogo constructivo entre Estados poseedores y no poseedores.
Señora Presidente,
Son muchos y muy penosos los casos en que el terrorismo internacional ha dado sobradas pruebas de su capacidad de destrucción. El uso de armas de destrucción masiva por parte de actores no estatales dejó de ser en los últimos años un problema abstracto o teórico y puso en evidencia la necesidad de que los Estados Miembros redoblemos esfuerzos por impedir que los grupos terroristas accedan a las armas de destrucción masiva, sus materiales conexos y/o sus medios de transporte.
La Resolución 1540 representa, por su alcance y naturaleza jurídica, la más clara respuesta de las Naciones Unidas a la problemática de las armas de destrucción masiva y su acceso a las mismas por parte de actores no estatales.
Es ilusorio pensar que vivimos en seguridad mientras existan tales materiales carentes de la debida protección, y sin que la normativa internacional sea de aplicación a nivel global.
En concreto, para la Argentina hace ya más de un año que ha entrado en vigor la Enmienda a la Convención sobre la Protección Física de los Materiales Nucleares. Asimismo, desde el año 2005, la Argentina participa en la Iniciativa de Seguridad contra la Proliferación (PSI) y, desde 2010, en la Iniciativa Global para Combatir el Terrorismo Nuclear (GICNT). En el marco de esta última iniciativa, se desarrollaron conjuntamente con Chile, dos ejercicios en materia de emergencias radiológicas, el primero en 2014 y hace tan sólo una semana el ejercicio “Paihuen 2017” en la ciudad de Bariloche.
Señora Presidente,
Se calcula que en el mundo más de 1500 personas mueren cada día como resultado de la violencia armada, y que un 60% de todas las violaciones de derechos humanos son cometidas con armas pequeñas. Las consecuencias son devastadoras para nuestras sociedades y atentan directamente contra el desarrollo sostenible.
Para hacer frente a este flagelo, Argentina subraya la necesidad de abordar el comercio no reglamentado de armas convencionales y la necesidad de explorar las sinergias que existen entre los instrumentos existentes: el Programa de Acción de las Naciones Unidas, el Tratado sobre el Comercio de Armas, y el Protocolo de Armas de Fuego.
Argentina se congratula de la reciente celebración en Ginebra de la Tercera Reunión de Estados Parte del Tratado sobre el Comercio de Armas (ATT), instrumento que aborda de forma integrada y articulada tres dimensiones de vital importancia: la cuestión de los derechos humanos, el desarrollo y la producción, y el comercio responsable de armas convencionales.
A nivel regional, Argentina continuará trabajando intensamente y realizando todos los esfuerzos diplomáticos posibles para apoyar al pueblo hermano de Venezuela. Mientras tanto y de acuerdo a lo acordado en la Declaración de Lima del 8 de agosto pasado, mi país exhorta a los Estados Parte del ATT, así como a los no Parte a que se abstengan de transferir armas a Venezuela, a la luz de los artículos 6 y 7 del Tratado.
Asimismo, en junio próximo tendrá lugar la tercera Conferencia de las Naciones Unidas para Examinar los Progresos Alcanzados en la Ejecución del UNPoA. Mi país otorga gran importancia a esta cuestión, constituyendo el Plan Nacional de Restricción de Armas de Fuego uno de los 100 objetivos de gestión de Gobierno.
Señora Presidente,
Para concluir, deseo resaltar una vez más el compromiso de la Argentina con los trabajos de esta Comisión y hacemos votos para que ésta sea una sesión fructífera. Para ello puede contar usted con la plena cooperación de mi Delegación.