Jueves 5 de marzo de 2020

Información para la Prensa N°: 047/20

 

El Gobierno argentino lamenta el fallecimiento del embajador Javier Pérez de Cuéllar y extiende sus más sentidas condolencias al pueblo y el Gobierno peruanos por tan invalorable pérdida para la hermana nación y toda la comunidad internacional.

Pérez de Cuéllar fue un notable diplomático que honró a nuestra región siendo el único Secretario General latinoamericano. Su compromiso con el diálogo y con los Propósitos y Principios de la Carta de las Naciones Unidas se tradujo en una contribución incomparable para la paz mundial y el progreso de la amistad genuina entre todas las Naciones, por lo que seguirá siendo una inspiración para las generaciones futuras.

El pueblo y el Gobierno argentinos siempre estarán agradecidos al embajador Pérez de Cuellar por sus permanentes esfuerzos durante su mandato como Secretario General de las Naciones Unidas para lograr una solución pacífica y definitiva a la disputa de soberanía referida a la Cuestión de las Islas Malvinas, de conformidad con las resoluciones pertinentes de dicha Organización.

Desde el comienzo de su gestión como Secretario General en 1982, ejerció de manera activa sus funciones de mediación y se puso a disposición de la República Argentina y del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte para que ambas partes se sentasen a la mesa de negociaciones para resolver la disputa de soberanía.

Hasta el final de su mandato como Secretario General en 1991, el diplomático peruano procuró a través de sus buenos oficios cumplir con el mandato que le había sido asignado por la Asamblea General en su resolución 37/9 y subsiguientes, aunque lamentablemente debido a la negativa del Reino Unido de negociar con la Argentina para cumplir con el mandato de la Asamblea General de las Naciones Unidas, dichos esfuerzos resultaron infructuosos.

El permanente compromiso de Pérez de Cuéllar con la solución pacífica de las controversias internacionales, tal como quedó demostrado por sus intensas gestiones en relación con la disputa de soberanía sobre las Islas Malvinas, Georgias del Sur y Sandwich del Sur y los espacios marítimos circundantes, constituye uno de sus principales legados.